Sí chicas sí, ya hace más de un añito que estamos por aquí. Los primeros posts fueron en julio y agosto del 2016, pero en septiembre empezó la regularidad. Así que tomo este mes como el oficial para soplar velas.
Es curioso, con un blog tan joven; un año después aún me siento que todo va empezando poco a poco. Es un proceso interesante si empiezas de cero… pero de cero-cero ¿eh?. Nunca había tenido un blog ni participado mucho en ellos, aunque siguiera a más de una decena. Entonces me sentía inexperta y prefería el rol de espectadora. Al menos hasta tener más conocimientos.
Y ese fue quizá uno de mis «fallos» antes de empezar. Pensar que si no lo tenía todo bajo control, sería un caos y acabaría siendo un blog que duraría un par de meses y se retiraría. Que, oye! puede pasar. Pero nunca se sabe hasta que no se prueba.
Así que, aquí estoy 1 año después, para contaros los diferentes procesos que ha ido viviendo Le Petite Idealist.
La primera fase por la que pasé fue la de bloqueo. Sí, sí, antes de empezar y ya bloqueada. Yo es que seguía a todos estos blogs tan bien hechos. Con contenido de calidad, fotos preciosas, con diseños muy originales y bonitos. Y lo veía super inalcanzable. Pero claro, no tenía en cuenta que todo ese talento venía dado por los muchos años de experiencia que acumulaban estos blogs.
Caí en la trampa de la comparación. !¿Pero cómo me iba a comparar si aún no había echo nada?!
Tuve que aprender a relativizar y vencer al perfeccionismo y comprender que la comparación con gente que lleva tantos años con un blog, no tiene sentido.
Si quieres crear un blog, adelante, pero asegúrate de hacerlo por que tú realmente quieres. Y que entiendes que vas a empezar poco a poco. La calidad de tus posts irán aumentando con el tiempo si eres perseverante. No se ha de confundir el tener ciertas aspiraciones y objetivos; con la exigencia y el perfeccionismo de la comparación.
Con esto quiero añadir, que mucha gente (me incluyo) siempre dice: «Tú solo empieza, y ya irá saliendo…» Pero claro, se ha de entender también, que no todo cae del cielo. Y ha de haber un compromiso con uno mismo y de cara al blog. Así que personalmente sí aconsejo una preparación previa básica. Leer experiencias de otros blogs, conocer las diferentes plataformas para publicar, informarse sobre servidores-dominios…
Una cosa no quita a la otra.
Yo, por ejemplo, como en Le Petite Idealist, el diseño y los descargables gratuitos tienen mucho peso. Antes de abrir el blog, adelanté unos 5-6 diseños ayudándome de recursos geniales que puedes encontrar en plataformas creativas como Creative Market.
Tu blog, es tu carta de presentación, así que es importante dedicarle tiempo antes de escoger una plantilla o de diseñarlo uno mismo. Una de las cosas que me fue mejor para tener una buena visualización de cómo quería la estética del blog, fueron los bocetos.
Crear plantillas guía me ayudó muchísimo a saber como iba a organizar las categorías, cuentas iba a tener. Dónde irian las imágenes, el texto … en resumen, la distribución de todo el espacio.
Una vez tuve la visión clara del blog, se me presentaban varias opciones. Contratar a un profesional, para que todo quedara perfecto y a punto. O probar yo misma, con plantillas y tutoriales. En mi caso, me decanté por la segunda opción. Ya había invertido en el servidor y dominio, y como no sabía como funcionaría el blog, preferí ahorrarme los costes de un profesional.
Y chicos, puede dar un vértigo impresionante al principio; pero con tantísima oferta de plantillas y con el tutorial adecuado, no tuve ningún problema en ir creando la estructura básica del blog.
*si es la primera vez que entráis en el mundo blog, y es para expandir vuestro negocio o acabar profesionalizándolo; sí que os recomiendo contratar a un programador profesional.

Y aquí empieza la acción. Márcate una fecha de inicio, empieza a preparar tus primeras entradas con antelación. Y cumple esa fecha. Y ¡ya esta! Una vez empezado, no sabéis lo bien que te hace sentir. Y ya es mucho más fácil seguir el ritmo.
Yo al principio tenía la sensación de no saber del todo lo que estaba haciendo ¡ahahaha! (a veces, me siento igual ahora) pero rápido empecé a interiorizar cómo funcionaba wordpress, en este caso, y a controlar el SEO, las palabras clave… y poco a poco, las cosas iban saliendo solas.
La última fase, que se transforma en un proceso permanente de crecimiento, es la de probar y probar. Tratar diferentes temas relacionados hasta encontrar un «niche» más definido. La cantidad de contenido y su regularidad. Decidir ofrecer coleccionables. Probar las redes sociales. Experimentar con tus fotografías … y un largo etcétera que cada uno ha de adaptar a su objetivo.
Pero sin duda, aquí es donde empieza el proceso de aprendizaje. Te vas dando cuenta de qué se te da mejor y qué no tanto. Es hora de centrarse en los puntos fuertes y sacarles partido. Y sobretodo, no tener miedo a equivocarse.
Yo he visto que para poder mantener la calidad en los posts, tenía que re-organizar la cantidad de días que decidía publicar contenido. Empecé con 3 posts por semana, y lo fui manteniendo unos meses, pero me acabé dando cuenta de que era una locura con mi situación personal fuera del blog. Así que he ido adaptando los horarios, y ahora publico 1-2 veces en semanas alternativas. Desde luego, un cambio para mejor, por que puedo dedicarle más tiempo a cada post, y a la vez ir expandiendo a Le Petite Idealist por redes sociales.
Chic@s, me gustaría saber si alguna de vosotras se está planteando empezar su blog. O si ya tenéis uno, estaría genial que compartierais vuestra experiencia, para que todos la pudiéramos leer. A mí me encantaría.
¡Mucha suerte en vuestros proyectos!