Limpieza de armario ¡Esta vez sí!

limpieza de armario

Tenía tantas ganas de escribir esta entrada. Este blog va a ser mi «catalizador» para ponerme manos a la obra con ciertas cosas que siempre se van aplazando. En este caso, os hablo del cambio de armario. Algo bastante sencillo y rutinario que todas hacemos al menos 2 veces al año. Pero que si le añadía el echo de que también quería eliminar todas aquellas prendas que o bien ya no me iban, o están gastadas, o me han dejado de gustar… el proceso se iba alargando cada vez más. Y todo eran excusas. Que si aún no llega el frío, que si no tengo tiempo y hay cosas más importantes por hacer. Que si quizá lo necesitaré más adelante… Vamos, que la pereza se disfrazaba de cualquier excusa, hacía acto de presencia, y aquí el armario quedaba igual que a principios de verano.

También me ha ayudado a motivarme el echo de que necesito comprar algunos básicos de invierno para esta temporada. Y con la limpieza vería claramente qué es lo que tengo y qué me hace falta realmente. A resumidas cuentas, ser mucho más práctica con las compras y ahorrar al no repetir prendas parecidas o «perdidas» por el armario.
De esta manera conseguimos un fondo de armario mucho más acorde a nuestro estilo actual. ¡Y mucho más espacio!

Voy a contaros lo que hago yo. No se trata de ningún método novedoso. Ya que los pasos a seguir son bastante lógicos y sencillos. Pero cómo lo que cuesta es ponerse a ello, os animo con este post, a que os unáis a mi. Y por fin hacer una limpieza de armario ¡como es debido!

Let’s do this!

    1. Sacar la ropa, zapatos, bolsos del armario.
      Deja tu habitación bien limpia y amplia, y vacía literalmente todo tu armario. Necesitarás espacio para ir haciendo pilas con toda tu ropa.
    2. Separa la ropa de verano y guárdala para el año que viene.
      Asegúrate de que esté toda limpia antes de almacenarla. Yo utilizo bolsas de plástico al vacío. Meto toda la ropa bien doblada, echo un par de pastillas antipolillas. Cierro y aspiro por un agujero especial que tienen. ¡El espacio queda reducido casi a la mitad!
    3. Pruébatelo TODO.
      Para mí, aquí se trata de pasárselo bien. Pruébate todas las prendas de invierno, si es posible delante de un espejo grande. Para que te veas desde todos los ángulos. E intenta disfrutar del proceso; es lo que acaba marcando la diferencia entre una tarea tediosa de una que disfrutes completamente.

      Con cada prenda, pregúntate:

      limpieza de armario
      -¿Se ve gastada o estropeada?
      -¿Me gusta?¿Me queda bien?
      -¿La he llevado este último año?
      -¿Es la talla correcta?
      -¿Hace que me sienta segura y a gusto al llevarla?
      -¿Podría llevarla a arreglar?

    4. Separa y clasifícalo todo en:
      Quedar: Todas las prendas que te sigan sirviendo y que volverán al armario. Intenta restringir el número de piezas sentimentales todo lo que puedas. Aquellas piezas que sabes que ya no te pondrás, pero que te cuesta tanto eliminar por el significado que tienen para ti. Unas pocas está bien y hasta es normal, pero como con todo, no hay que pasarse.
      Tirar: Todas las prendas que tengan agujeros, que suelten bolitas de lo gastadas que están, con manchas imposibles de quitar… ¡Fuera!
      Donar: Aquellas prendas que aún usadas, puedan servirle a cualquier otra persona. Es importante donar ropa en buen estado, sino, a la pila de tirar.
      Vender: Hay algunas prendas que quizá solo hayamos llevado en una ocasión especial y estén prácticamente nuevas. Si es así, está muy bien que consideréis la opción de venderlas. Hoy en día hay mil maneras de hacerlo, a través de app’s, ebay, mercadillos de segunda mano …
      Arreglar: En esta pila, quizá podamos salvar algunas prendas que estén en buen estado general, pero que lleven una pequeña tara, o un agujero que se puede arreglar. Quizá la talla también se puede salvar con unos arreglos. Dependerá de lo que haya costado esa prenda y de lo que vaya a costar el arreglo. Luego cada una verá si vale la pena o no.
    5. Inventario del armario actualizado y wishlist.
      Al crear nuestro inventario, básicamente tendremos una lista a mano de todas las piezas que tenemos en nuestro armario. Cosa que facilita muchísimo el proceso de planear y comprar aquello que nos hace falta. Seremos mucho más conscientes de qué estilo tenemos y qué estilo queremos tener. En consecuencia, mucho más pro-activas para acercarnos a nuestro objetivo.

Yo estoy en ello estos días. Pronto subiré una lista con todos los básicos de invierno que nunca fallan. ¿Cuáles son vuestros favoritos?

Aurora.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.